Cuatro temporadas para esta nueva versión de la exitosa sitcom de fines de los '90, donde solo reconoceremos los nombres y personajes mas allegados a Sabrina, como sus dos tías, Salem (el gato que hablaba, pero no en esta versión) y Harvey. Los tiempos cambian y debemos admitir que la versión original que tanto nos gustó, no funcionaría en los tiempos que corren. El hogar de Sabrina, ya no es la linda casa en las afueras de Boston, sino una propiedad rodeada de un cementerio, muy al estilo Los Adams, con coche fúnebre y morgue incluida. La historia es compleja porque veremos nuevos personajes que se hacen pasar por humanos, personajes de otros mundos, incluso una puja de poder en el infierno, donde Sabrina entra y sale como la dueña del lugar. También se deja de lado la comicidad y la inocencia. La serie no tuvo el éxito esperado y Netflix canceló el producto, obligándolo a cambiar el guion para darle un fin anticipado. Creo que jugaron con fuego, es muy difícil tocar los clásicos que marcaron nuestra juventud. Estoy seguro que sucedería lo mismo con una nueva versión de ALF o La Niñera por ejemplo. Por supuesto que hay que verla como una serie en donde todo puede pasar y no podemos atar cabos aquí. El final es controversial y choca de frente con un limite que no debería haber sucedido, sabiendo al publico que va dirigido. En resumidas cuentas, no me gustó, pero me pareció una reversión lograda y ajustada para los tiempos de hoy.
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