Esta película la ví 2 veces por error, pero vale la pena recomendarla. Nicole Kidman trae a la vida a Grace Kelly, la actriz de Hollywood que se enamoró del Príncipe de Mónaco Raniero III tras una invitación oficial al palacio, mientras ella rodaba una película en el Principado. Convirtiéndose mas tarde en Princesa y abandonando los flashes hollywoodenses.
La película comienza a contar la historia 6 años después del casamiento, con la visita al palacio de Alfred Hitchcock quien tenía intenciones de que la Princesa vuelva a Hollywood para su próxima película. Una idea algo absurda, considerando que Mónaco se hundía políticamente al querer ser anexada a Francia por el entonces presidente Charles de Gaulle.
Una película políticamente correcta que no recae en el morbo de su muerte, sino que la recuerda como una mujer que no era solo una cara bonita, y que podía hacer algo por su pueblo adoptivo y por su familia. No es un gran film pero no deja de ser una buena recomendación.
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