Netflix está de oferta y en la mesa de saldos se esmeró en destacar a Sky Rojo. Podemos decir que por más que cuente con un elenco internacional y el mismo director que "La casa de papel", la propuesta se queda corta.
Lo que suma y lo que resta: Suma el timing vertiginoso, la corta duración de los capítulos, y la actuación (nos ponemos de pie) de Asier Etxeandia ( Raúl de la Riva en Velvet).
Resta mucho el concepto de banalizar o alivianar la trata de blancas, un falso empoderamiento feminista, tras una cortina de humo de tiros, golpes y un agotador escape.
El girl power exacerbado, con dos latinas y una española escapando en stilettos de sus proxenetas, copia economizada de una película de Tarantino. Las varias semanas en el top ten de Netflix, fueron fruto de un excelente marketing publicitario, que incluyó a Miguel Ángel Silvestre como figura internacional española y a Lali Esposito, para el mercado latino.
La segunda temporada solo reafirma lo dicho arriba. Sigan de largo, no hay nada que ver aquí.
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