Ser adolescente en el 2000 no fue fácil, bueno...nunca lo fue. Pero si tu adolescencia coincidió con esta década, podes ver "Yo, adolescente" para conectar con un poco del pasado.
Las malas actuaciones no me dejaron concentrarme, admito, pero tampoco debes hacer demasiado esfuerzo. Si superas esto, la película entretiene sin ser buena. Corría el año 2004 y Zabo estaba en un recital de Árbol, la misma noche del incendio en Cromañón. Padres preocupados y adolescentes siendo adolescentes. A este disparador, le sumamos el suicidio de un amigo y el despertar sexual. Que lindo es ser adolescente.
Zabo utilizó Fotolog como diario personal para desahogarse y compartir con otros sus sentimientos. Tal vez no le alcanzaban los amigos, o su familia, pero todos fuimos un poco así, así que no juzguemos. Zabo se enamoró de su mejor amiga, pero no fue correspondido, y el drama duró una eternidad, que en tiempos adolescentes sería 1 hora. Experimentó con un amigo del colegio también y con una chica mayor a él. Mientras seguía preguntándose por que su amigo eligió suicidarse. Tantas preguntas en una misma cabeza solo dan lugar a una depresión invisible y silenciosa como las respuestas que recibía Zabo.
El fotolog de Zabo era leído por miles de adolescentes que compartían y sentían en carne propia lo mismo que él. Seguramente el mensaje que deja esta película es que la generación adolescente del 2000 fue silenciada, había muchas cosas de las que no se podían hablar. Por suerte las generaciones siguiente han cambiado el paradigma. Tal vez, algo hemos aprendido.
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